Su consagración artística se produjo tras la publicación de la trilogía Die Schlafwandler (Los sonámbulos, 1931-1932), compuesta por Pasenow oder die Romantik, Esch oder die Anarchie, Huguenau oder die Sachlichkeit. La obra concebida como un fresco histórico de la transición del siglo XIX al XX, presentaba con ironía y suma complejidad estilística la victoria de las concepciones materialistas sobre los antiguos ideales individualistas.
Entre 1934 y 1936 empezó a escribir Der Versucher (El Tentador), que sólo completaría en el exilio: es una parábola sobre la situación alemana. Con la anexión de Austria en 1938 fue detenido por ser su familia de origen judío. Tras ser liberado, al poco tiempo, gracias entre otros a James Joyce, emigró a Inglaterra y Escocia. En 1940 marchó a los Estados Unidos, allí escribió su más ambiciosa novela, Der Tod des Vergil (1945, ‘’La muerte de Virgilio’’), donde la realidad y el delirio se mezclan durante las últimas horas de vida del poeta latino, en diálogo con el emperador Augusto; en su época veía Broch cierto paralelismo con la propia. La obra fue subvencionada por la fundación Guggenheim, y se publicó en alemán y en inglés.
En unos pocos años, antes de su desaparición, logró completar obras con grandes trabajos, que aparecieron póstumamente. Asi sucede con su Psicología de las masas. Las Cartas representan uno de los mayores documentos de mediados del siglo XX. Finalmente en 1950 dio a la imprenta Die Schuldlosen (Los Inocentes), análisis de la Alemania prehitleriana, a partir de escritos publicados veinte años antes y refundidos en esta obra. En el exilio ayudó a muchos perseguidos, entre otros a Robert Musil, sin que éste lo supiese. Murió en Estados Unidos, su obra disfrutó posteriormente una continua revalorización, que perdura hasta hoy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario